Trabajar los celos infantiles a través de la lectura

Los celos entre hermanos/as son muy comunes y muchas veces no sabemos cómo actuar. Es fundamental hablar con nuestros hijos/as y mostrarnos comprensivos, pero también debemos tener en cuenta que los niños no necesariamente saben qué les pasa ni entienden qué es estar triste o enfadado.                                                                                                                                                    Por ello, os dejamos una serie de cuentos, a través de los que se pueden trabajar los celos y mediante los que nuestros hijos se pueden aprender a identificar y comprender esos sentimientos.

 

- El cambalache 
 de 4 a 5 años

El hermanito bebé de Carolina Cocodrilo pasa todo el día babeando, pero aún así, mamá Cocodrilo a cada instante dice que es preciosísimo. Carolina está muy celosa, así que decide ir a la tienda de bebés y hacer un cambalache por un nuevo hermanito: uno justo a su medida. ¿Habrá alguno que le guste de verdad? La historia cuenta con altas dosis de humor los sentimientos que pueden acompañar la llegada de un nuevo hermanito

- Julieta, estate quieta!
4 a 5 años

Julieta, estate quieta! es un magnífico álbum ilustrado de la consagrada autora en Literatura Infantil, Rosemary Wells. Es una historia divertida, algo loca, cariñosa e imaginativa sobre la importancia de la familia y el lugar que cada uno ocupa dentro de ella.

¡Pobre Julieta! Nadie le hace caso. Su madre siempre está ocupada con Salustiano, que todavía es un bebé, y su padre ayuda a Flor, la hermana mayor, a hacer los deberes. ¡No es nada fácil ser el mediano de tres hermanos! Y Julieta está a punto de perder la paciencia.

- Peluso
8 a 9 años

Las familias de osos polares suelen tener dos oseznos. Peluso ha sido el tercero no esperado, y la suerte del tercero es siempre difícil e incluso cruel. Debe esperar a que sus hermanos terminen de mamar para poder tomar él los restos de leche y es más débil y pequeño. A veces, le parece que su madre le mira como si escondiese un triste secreto. Sin embargo, Peluso se esfuerza por sobrevivir y realizar el viaje que cada año hacen al mar los osos polares en busca de comida para reponer fuerzas. Durante el viaje conocerá a Cachito-De-Nube, una osita de la que se hará amigo. Finalmente, Peluso logrará llegar al mar.

- ¡Porque siempre va a ser así!
de 6 a 7 años
Ser el más pequeño de la casa no es fácil para Juan, que observa frustrado los privilegios inalcanzables del hermano mayor. Por eso, se planta ante los padres con la decisión de marcharse de casa, en busca de un lugar propio. Ha preparado su mochila, y en ella está todo su mundo: una tableta de chocolate, un oso, un dragón de plástico, una caja de pompas y la calculadora de papá. Con la mochila a la espalda, como quien carga con el peso de su vida, la autora coloca al pequeño frente a los padres a explicar su drama personal. Página tras página, la mochila, que “aprieta un poco” sugiere la dificultad de crecer, de cargar con las dudas y complejos en un mundo injusto. A veces la aprieta contra él, para terminar soltándola al final, cuando el cariño de los padres relaja la tensión y se soluciona el problema existencial del pequeño.

- Ha sido el pequeño monstruo
+ 5 años 
Ana va a tener un hermanito y antes de irse al hospital su mamá le regala un monstruo de peluche para que no se sienta sola. Ana y el pequeño monstruo se vuelven muy amigos, pero cuando llega el hermanito a casa empiezan los problemas. Este cuento relata los celos de una hermana mayor, encarnados en “el pequeño monstruo”. El monstruo, puro reflejo de los celos de Ana, reacciona muy negativamente a la llegada del bebé, pero al final se resuelve el conflicto. La manera en que se resuelve el problema y las preciosas ilustraciones realizadas con tanto esmero por Helen Cooper, hacen que este libro sea tan especial.

- Cuando estoy celoso
De 3 a 6 años 
Un libro que ayuda a los niños a entender sus sentimientos, a conocerse mejor y a controlar, por tanto, sus reacciones. Este libro explica como el conejo siente celos y por eso hace tonterías; enseña que todos somos especiales y no hay que compararse con nadie.